Crónica de la reunión de formandos, Región Europa

Del 7 al 10 de febrero de 2025

“Una reunión para recordar”

Nuestra reunión de formandos de la región Europa, celebrada del 7 al 10 de febrero de 2025 en Temú, Italia, será recordada como un espacio privilegiado de encuentro, oración y fraternidad. Inspirados por las intuiciones que surgieron en la asamblea del proyecto de internacionalización en Madrid el pasado septiembre de 2024, nos propusimos compartir vida, desafíos y esperanzas como hermanos en formación. Este propósito nos acompañó en cada momento de nuestro tiempo juntos.

El viernes 7 de febrero, la llegada a Milán marcó el inicio de nuestra aventura. Fuimos cálidamente recibidos por el hermano Claudio, quien nos llevó a recorrer el corazón de la ciudad. La imponente Duomo “Catedral de Milán”, con su arte gótico y la serenidad de su museo, fue un preludio de la profundidad espiritual que nos esperaba. Al caer la noche, partimos hacia Temú, donde nos recibió la magia de la nieve, una experiencia nueva para algunos de nosotros. Compartir este primer instante de asombro y belleza natural selló nuestra primera noche con un sentido especial de unidad.

El sábado comenzó con un compartir fraterno en el que cada uno expuso sus experiencias, alegrías y retos en esta etapa formativa. Reflexionamos juntos sobre cómo transmitir la experiencia de Dios a los jóvenes en contextos de creciente secularización, un desafío que nos une y nos impulsa. Fue un diálogo sincero, alimentado por nuestras vivencias personales y pastorales. Por la noche, continuamos nuestro encuentro en un restaurante del pueblo Ponte di legno, donde las risas y las conversaciones se extendieron entre platos cálidos y un ambiente acogedor.

El domingo fue un día cargado de espiritualidad y reflexión. Por la mañana, el hermano Fernando guio un momento de oración inspirado en el evangelio del día, recordándonos nuestra vocación a ser “pescadores de hombres”. Más tarde, disfrutamos de la nieve en Passo del Tonale, un pintoresco pueblo ideal para esparcimiento y contemplación. Al regresar, el almuerzo dio paso a un diálogo profundo sobre el proyecto de internacionalización en Europa, un tema que nos comprometió a discernir juntos retos y oportunidades para nuestra misión en esta región. La jornada culminó con una celebración de la Palabra dirigida por el hermano Saúl, que nos animó a mirar con honestidad y gratitud nuestras etapas formativas. Una cena festiva cerró el día que dejó un sello de alegría en el encuentro.

El lunes, el retorno estuvo marcado por corazones agradecidos y una sensación de renovación. Este encuentro, sencillo, pero profundamente significativo, nos recordó el valor de nuestra vocación compartida y la importancia de estos espacios de convivencia. Nos despedimos con el deseo de mantener viva esta fraternidad y de seguir construyendo juntos caminos de fe y compromiso, desde una mirada congregacional.

Mirando hacia atrás, estos días en las montañas italianas fueron un oasis de espiritualidad y fraternidad, un recordatorio del amor que nos une y de la misión que nos inspira. Nos despedimos con el corazón lleno de gratitud y esperanza, seguros de que esta reunión es solo un paso más en un camino que seguimos construyendo juntos.

Sus hermanos Saúl, Fernando, Alfredo y Claudio.

Discover more from Cor Unum

Subscribe now to keep reading and get access to the full archive.

Continue reading