El pasado 03 de marzo, el mismo día que N.M. cumplió 88 años de haber fallecido después de cumplir su misión aquí en la tierra, celebramos junto con el obispo de Limeira, Dom José Roberto Fortes Palau, los 25 años de creación de la comunidad, ahora quase paróquia, Santa Marta y Santa Paula, aquí en Leme, São Paulo.
Nos preparamos para este día celebrando un triduo. El P. David Ascencio MSps comenzó agradeciendo a la Virgen María el primer día, junto con el no. Rolando y toda la comunidad. En el segundo día, contamos con la presencia del P. Isaías, actual rector del seminario de filosofía de la diócesis y primer administrador de la quase paróquia, que se desligó de la paróquia Senhor Bom Jesus en el año de 2018. Él agradeció a Dios Hijo, por estos años de vida de la comunidad. El tercer día, como actual administrador, el P. Alejandro MSpS, agradecí a Dios Padre, por Su paternidad hacia la comunidad.
En el dia de la fiesta, el obispo agradecio al Espíritu Santo, por Su presencia vivificante en la comunidad. Participamos en la concelebración, el P. Miguel Ochoa MSpS, que vino de la comunidad de Itapevi; el Diácono permanente, Leonardo Bergamasco, que forma parte de esta comunidad de Santa Marta y Santa Paula; el P. David Ascencio y un servidor, P. Alejandro. El Hno. Rolando MSpS tambien estuvo presente, usando el paliacate del movimiento juvenil “Hodos”.
En su homilía, Dom Jose hablo de la importancia de caminar juntos, siendo extranjeros que regresamos a la Casa del Padre, haciendo referencia al significado de la palabra parroquia. También enfatizó el hecho de ser familia y poder resolver los conflictos dentro de ésta, de evitar los chismes, así como saber construir la comunidad con el esfuerzo de todos, pues cuando alguien deja de participar, hace falta al igual que un miembro en la familia.
Al final, después de develar una placa conmemorativa con la frase de N.M. que hace referencia a “Ni la Cruz está sin Jesús, ni Jesús sin la Cruz…”, (pues de la misma manera, una comunidad no existe sin Cruz), se tomó una fotografía con todos los que celebramos
este momento importante como comunidad. Esperamos que Dios, al derramar Sus Gracias en este Jubileo de Plata, nos conceda
vocaciones para nuestra Congregación e Iglesia. ¡Saludos!
