El domingo 16 de junio a la 1:30pm, la comunidad de Huexotitla (Templo María Madre de la Iglesia) estuvo de fiesta. Laicos, familiares, amigos y MSpS acompañamos a Neme, MSpS en la celebración de sus 25 años de ordenación sacerdotal. De parte del Consejo Provincial estuvo presente Baltazar Góngora, MSpS. Representando su familia estuvo presente su hermana Magdalena, su cuñado Octavio y su sobrino Octavio Eduardo.
En una eucaristía amena y llena de alegría, Neme nos fue compartiendo el significado de su ministerio a lo largo de estos años. Desde una memoria agradecida, nos hizo caminar junto con él, en los diferentes lugares en los que ha vivido y realizado la misión. Sin duda, lugares en donde ha podido confirmar su vocación y ministerio.
Así, primeramente, nos compartió sobre su experiencia en la comunidad de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. En esos años, recibió un gran detalle de parte del obispo Samuel Ruíz († 2011). Una estola y, entonces, el significado de ser sacerdote. “La estola es el signo del sacerdote porque representa al buen pastor que carga a sus ovejas. Una bella carga, florida y llena de vida”. Toño y Paty, laicos de la comunidad de Tuxtla con quienes compartió misión hace más de 30 años, le ayudaron a presentar este signo.
Después, nos llevó a la Santa Cruz del Pedregal (CDMX) en donde estuvo 9 años. A pesar de que no entendía muy bien las razones por las cuáles lo enviaron a esa comunidad, su familia y sus amigos le fueron ayudando a ir comprendiendo mejor la bondad de su presencia en ese lugar. Durante esos años, su misión la pudo realizar tanto en la parroquia como en el Colegio INHUMYC. Recordaba que, junto con Marcos, MSPS hicieron un espacio saludable para los jóvenes del Pedregal. Santiago y Clara, jóvenes que en esos años participaron con Neme en la Pastoral Juvenil, le ayudaron a traer de la CDMX algunos signos que fueron utilizando (e inventando) para las celebraciones con los jóvenes.
De la CDMX nos fuimos para Costa Rica. Pura Vida! Fue su primera experiencia en el extranjero. Allí vivió 3 años y medio. Y aunque no estaba en sus planes personales vivir fuera de México, pudo ir haciendo camino de internacionalización para la Provincia y la Congregación. La compañía de su familia y amigos también le fueron muy importantes en esta etapa de su vida. El mural presentado en la celebración nos permitió observar esa vida compartida en Costa Rica.
Su otro destino fue Guatemala en donde compartió vida y misión con Balta, MSpS. Llegó a la comunidad de Guastatoya y constató que es un pueblo bonito. La gente de ese lugar es buena. Sin embargo, comentó que le costó que lo quisieran porque cuando llegó a la comunidad la gente pensó que se iban a llevar a algún misionero. Digamos que así ya les había pasado y entonces las personas del lugar ya estaban prevenidas. Para Neme, Guastatoya representó mucha vida, mucha novedad. Una vida bonita y alegre, pero también cansada. Pues estar en el extranjero es estar sintiendo muchas cosas, estar aprendiendo en cada momento. El signo que nos compartió fue un Cristo Resucitado pintado con los colores y la vestimenta de esa cultura. Un Cristo que le representa vida nueva, resurrección, frescura, nueva capacidad de amar.
Por último, con dolor y tristeza nos compartió que llega a Puebla después del cierre de la comunidad en Guastatoya, Guatemala por motivos externos. No obstante, ha llegado a esta comunidad recordando que hace más de 30 años pudo estar como EFOSO (hermano en la etapa de servicio apostólico). Además, se reencuentra con Hilario, Carlos y Ricardo con quienes ya ha compartido la vida en aquellos años de formación. Hilario fue su formador en la etapa de la Teología. Ahora, hoy le toca nuevamente estar aquí en Puebla. En Huexo. Y su corazón se va llenando de alegría porque Huexo es un espacio con mucha vida, mucha ilusión. Un lugar lleno de esperanza, pues participan una gran cantidad de adultos, jóvenes y niños. Con un plato de talavera representó este lugar al que llega y se siente invitado a abrir su corazón.
De ese modo, Neme hizo memoria de 25 años llenos de experiencias que lo han ido formando de muchas maneras. Sobre todo, hacer la experiencia de ir aprendiendo a ser sacerdote. A disfrutar de su ministerio. Eso es lo que agradece. Su historia de vida llena de muchos referentes: familia, hermanos, amigos…
Finalmente, Carlos de León, MSpS le compartió a Neme unas palabras fraternas, dándole la bienvenida a la comunidad de Huexotitla. Dio gracias por el sacerdocio de Neme. Agradece su llegada porque es un buen hermano, alguien que genera un ambiente fraterno. Y le invitó a que se deje querer por la comunidad de Huexo. Eso desea para él, que sea alguien muy querido por todos.
Después de la eucaristía, seguimos celebrando a Neme compartiendo unos ricos tacos de diversos guisados. El mole poblano no podía faltar. Así como un buen mezcal y un rico pastel de piñón. Fue una tarde realmente familiar y llena de alegría.
Gracias Neme por tu vocación, tu fraternidad y tu ministerio. Que Dios te siga guiando y abriendo el corazón para que nunca dejes de amar y compartir tu vida con todos. ¡Felicidades!